La Exponential Roadmap Initiative (ERI), persigue el objetivo de alcanzar emisiones netas de GEI cero para 2050, desde pasos incrementales hasta un salto exponencial en la ambición climática. El ERI propone seguir lo que ellos llaman la «ley del carbono», que es una trayectoria exponencial, inspirada en la Ley de Moore, que reduce las emisiones de GEI a la mitad cada década.
Para seguir la ley del carbono, ERI presenta una Hoja de ruta exponencial que contiene 36 soluciones y siete estrategias para escalar la transformación en seis sectores: energía, industria, transporte, edificios, consumo de alimentos y soluciones basadas en la naturaleza (fuentes y sumideros). Estas soluciones requieren la participación de ciudades, empresas e individuos, y están destinadas a una transformación rápida para mejorar la eficiencia en el uso de energía y materiales, reducir la demanda de actividades intensivas en energía, electrificar tanto como sea posible, producir electricidad a partir de fuentes de energía renovables, cambiar la agricultura de una fuente de carbono a un sumidero de carbono, y aumentar la captura y el almacenamiento de carbono.
Lograr la transición rápida planificada en todos los sectores económicos para cambiar hacia patrones de consumo y producción sostenibles requiere una revolución digital. El desarrollo tecnológico exponencial que pueden traer la IA, la computación en la nube, blockchain, 5G e IoT, será parte de él. Con la implementación correcta, estas tecnologías pueden reducir considerablemente el consumo de energía y el desperdicio de materiales en todos los sectores, al tiempo que apoyan la salud global, la sostenibilidad, la biodiversidad y los objetivos económicos. También pueden acelerar los cambios hacia nuevos modelos comerciales disruptivos.
La revolución digital puede redefinir cómo se configura la producción y el consumo, impulsando una nueva economía circular que funcione tanto para las personas como para el planeta. Al implementar modelos comerciales circulares que utilicen materiales de manera más eficiente, la industria en la UE podría reducir un estimado de 296 millones de toneladas de CO2e por año para 2050 (56% de las emisiones totales de GEI), y la industria a nivel mundial podría reducir un estimado de 3.6 mil millones de toneladas por año a nivel mundial.
La circularidad está fuertemente alineada con la tendencia de digitalización que se está extendiendo por todas las industrias. Las soluciones digitales pueden proporcionar datos en tiempo real sobre la ubicación, el estado y la disponibilidad de un artículo. También pueden aumentar la trazabilidad de los materiales, la facilidad de acceso a productos y servicios y hacer que los procesos sean más convenientes y efectivos.
Por ejemplo, el reciclaje puede tener muchas sinergias con la digitalización. El uso de tecnología de sensores e IoT puede reducir rápidamente el costo de fabricación de diferentes materiales y productos, lo que respalda la automatización del desmantelamiento y la clasificación que es fundamental para un reciclaje más rentable. El robot de reciclaje de iPhone de Apple, Daisy, que desmonta los iPhones para recuperar materiales valiosos en su interior, es un ejemplo de esta sinergia.
Descargue el informe para obtener más información.
Es fundamental que la revolución digital tenga la sostenibilidad en su núcleo. Las tecnologías emergentes aún están lejos de eso. Aunque la sostenibilidad está ascendiendo en la agenda de muchos grandes actores del sector tecnológico, la sostenibilidad de las cadenas de suministro sigue siendo un desafío crítico con un amplio margen de mejora. Los desarrollos tecnológicos emergentes, como las nuevas aplicaciones de inteligencia artificial, la informática de punta y el IoT todavía se encuentran en un modo de aprendizaje que no está poniendo la sostenibilidad en su centro. Y, a pesar de ganar atención e impulso, los aspectos del cambio climático y la sostenibilidad tampoco se están adoptando plenamente en la formulación de políticas. El desarrollo de las industrias digitales también debe considerar adecuadamente la posibilidad real de efectos de rebote, que se cubren a fondo en la investigación pero con poca consideración en la práctica.
Los hallazgos de este informe han generado una serie de 12 recomendaciones destinadas a los responsables de la formulación de políticas y agentes clave de decisión de los sectores público y privado. Las recomendaciones tienen como objetivo aprovechar la tecnología emergente en la lucha contra la emergencia ambiental mientras se defiende una nueva cultura de sostenibilidad en torno a los productos y servicios digitales.
Descargue el informe para conocer las 12 recomendaciones que conducen a un futuro digital más ecológico.
